Un bebé es una de las bendiciones más grandes tanto para sus padres como para toda la familia, recuerda que en la biblia nos dice que nuestros hijos son la herencia que nuestro Padre Celestial nos da aquí en la tierra, es por ello que debemos siempre agradecer a Él por cada uno de ellos.
Hermosa Oración para Pedir Protección por un Bebe
La mayor bendición para una persona o una pareja es la dicha de recibir a sus bebes llenos de salud, es importante que siempre tengamos presente que solo nuestro Dios puede protegerlos y guiarlos por el buen camino.
Amado Padre Celestial, en este momento
vengo ante tu presencia para darte gracias
por todas las bendiciones que me has
concedido hasta este momento, quiero
agradecerte por mi familia
y por mis hijos.
Señor, también quiero pedirte perdón,
si en algún momento te he ofendido,
ayúdame a poder ser una persona digna
de Ti y de todas las bendiciones
que tú me das diariamente.
Tú eres un Dios misericordioso y compasivo,
es por esa razón que en este día yo quiero
entregar en tus manos a mi bebe para
que seas Tú guardándolo
de todo mal y peligro.
No permitas que nada malo pueda tocarlo
y que cualquier enfermedad se aleje de
su vida, concédenos el entendimiento y
la sabiduría para saberlo guiar por el camino
correcto, para así hacer de
él una gran persona.
Nosotros somos sus padres y lo amamos,
pero reconocemos que nadie lo ama más
que Tú, pues fuiste Tú quien lo coloco en
mi vientre y permitió que
viniera al mundo con salud.
Gracias porque sé que Tú has escuchado
mi oración y puedo estar seguro de que
todo se hará de acuerdo
a tu santa voluntad.
Gracias por cada una de tus bendiciones
en el bendito nombre
de Tu hijo Jesucristo,
Amén.
Que dice la Biblia sobre los bebes
Algo que debemos tener claro es que todos los niños del mundo son de Dios. Es por ello que en un pasaje podemos leer que Jesús les dijo a sus discípulos ‘Dejad a los niños venir a mí, porque de ellos es el Reino de los Cielos’. Por tal motivo siempre debemos tener presente que en el único lugar donde ellos van a estar seguros es en los brazos de nuestro Señor Jesús.
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