Poderosa Oración para Proteger y Bendecir a mis Hijos con la Sangre de Cristo

Nuestros hijos son la bendición más hermosa que El Señor le puede conceder a todo matrimonio, pero recuerda que es importante que nuestros hijos crezcan bajo la cobertura y protección de Dios, porque de lo contrario pueden ser víctimas del enemigo. No olvides que la biblia nos dice que él anda como león rugiente buscando a quien devorar.

Oración para cubrir a mis Hijos con la Sangre de Cristo

Para todo padre es muy importante el bienestar y seguridad de sus hijos, es por esa razón que debemos tener en cuenta que no existe ni persona ni lugar más seguro que en las manos de Cristo, por tal motivo debemos orar a Dios pidiendo la protección de la herencia que Él nos ha dado aquí en la tierra.

Amado Dios de Israel en este día, para darte

las gracias por todas las bendiciones que Tú me

has concedido a mí y a toda mi familia, gracias

por mis hermosos hijos, por mi pareja y por cada

uno de mis seres queridos.

Quiero agradecerte porque reconozco que es gracias

a Ti que todos podemos seguir en pie y en

victoria a pesar de las adversidades que el enemigo

nos coloca en frente para

hacernos desistir.

Padre, quiero pedirte perdón por cualquier ofensa

cometida en tu contra, perdóname si te he ofendido

con mis pensamientos o con alguna mala acción

y ayúdame a ser una persona digna de todo el amor

que Tú me ofreces día a día.

Perdóname si en algún momento yo te he dejado de

lado para seguir los instintos de mi corazón, ayúdame

a doblegar mi humanidad y a solo hacer tu voluntad

para así poder llevar una vida

de santidad.

Señor Jesús, en este día vengo ante Ti para pedirte

muy especialmente por mis hijos, Señor, ellos son

el mejor regalo que Tú me has concedido, pero yo

sé que más de lo que yo los ama,

está tu amor por ellos.

Es por eso que en este momento quiero colocarlos

en tus manos, sé Tú guiando cada uno de sus pasos

y no permitas que ellos se desvíen

del camino correcto.

Cúbrelos con tu sangre preciosa y no permitas que

ningún dardo del enemigo pueda tocarlos y hacerles

daño, aleja de sus vidas toda persona maliciosa

para que nadie pueda lastimarlos

ni física ni espiritualmente.

Señor, aunque son jóvenes, te pido que seas

Tú fortaleciendo su Fe y confianza en para

que así ninguna prueba ni adversidad pueda

hacerlos dudar de Ti ni

de tu poder.

Que ellos puedan ser luz en medio de las tinieblas

de este mundo, que ellos puedan ser una voz

de esperanza para todas aquellas personas y

jóvenes que sienten que sus vidas se

encuentran perdidas.

Derrama sobre ellos un poco de tu sabiduría y

discernimiento para que ellos puedan llevar Tú

palabra a donde quiera que vallan, pon la gracia

de Tu Espíritu Santo sobre ellos para que puedan

atraer muchos más jóvenes a

tu rebaño.

Gracias por mis hijos, porque a pesar de que este

mundo se encuentra perdido en el pecado,

Tú nos has mostrado el camino correcto para

educarlos y enseñarles

de Tu palabra.

Muchas gracias porque sé que Tú has escuchado

mi clamor y sé que Tú obraras conforme a

la voluntad de tu corazón, en el poderoso

nombre de Tu hijo Jesucristo,

Amén.

Que nos dice el Salmo 127, 3

En el Salmo 127, versículo 3 podemos leer que David escribió ‘herencia del Señor son los hijos; Cosa de alto valor es el fruto del vientre’. David sabía que no había nada más valioso para la vida de un hombre que sus hijos, pero también tenía claro que son mucho más importantes para Dios.